Liderar: Lo que me enseñó una Harley Davidson

Siempre he creído que el liderazgo no se trata solo de tomar decisiones en la sala de juntas, de enviar memorandos o preparar lindas presentaciones; sino de la habilidad para enfrentar los desafíos en todos los aspectos de nuestra vida y de cómo conseguimos motivar a nuestro equipo de trabajo para alcanzar los objetivos.

Ya sea al frente de un equipo increíble de profesionales (si, ya sé. Lo repito mucho), que trabaja por resolver una necesidad de negocios de uno de nuestros clientes; enfrentando el reto de generar más valor para el mercado a través de soluciones de tecnología o rodando en mi Harley Davidson, hay una premisa constante en mi mente: somos el resultado de nuestras decisiones, lo que hacemos hoy define el terreno mañana.

Cuando hablamos de «modernizar hoy para liderar mañana», no estamos hablando sólo de tecnología informática. Claro, es nuestro negocio; pero también nos obliga a un cambio de pensamiento: modernizar es prepararse, anticiparse, entrar a la cancha de los negocios con el pie derecho antes que tu rival. Pero ¿qué significa realmente liderar mañana?

Para mí, liderar mañana es tener la capacidad de adaptarse rápidamente, de estar preparado para lo inesperado, y de mantener la templanza cuando el camino se vuelve desafiante y hay que tomar la mejor decisión en el menor tiempo. Es aplicar esas mismas habilidades que utilizo cuando estoy en la carretera a bordo de mi moto, a buena velocidad y al frente de un grupo de grandes amigos moteros. En esos momentos mi responsabilidad como líder es atender la dificultad de una curva o un rebase y guiar por el camino seguro, vigilar el tráfico que compite por el espacio y desarrollar un sentido de anticipación asertivo.

Liderar mañana significa pensar más allá de lo obvio, de lo inmediato. Se trata de construir algo que no solo funcione hoy, sino que sea resiliente, flexible y que ofrezca la confianza que está listo para enfrentar cualquier desafío que pueda surgir. Y esa misma mentalidad la aplico en mi trabajo diario en REDSIS, asegurando que las soluciones tecnológicas que ofrecemos permitan a nuestros clientes estar en la mejor posición para afrontar los retos de negocio presentes y futuros.

Liderar mañana significa motivar a mi equipo a dar ese extra que nuestros clientes esperan. Conseguir su compromiso por la excelencia profesional y cuidar cada detalle buscando generar valor diferenciador que nos destaque entre nuestra competencia. Liderar es asociarse con proveedores líderes de la industria y asegurar la permanencia y soporte a largo plazo en el mercado para que nuestros clientes no sientan que se compromete su inversión.

Así que, ¿cómo estamos liderando hoy para asegurar el mañana? Al final del día, no es solo una cuestión de tecnología, sino de actitud, preparación y visión.

¿Cómo aplican ustedes estos principios en su vida y trabajo? Me encantaría conocer sus historias y reflexiones.

Gracias,

Alfonso L. Mogollón
Gerente Comercial

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